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¿Qué es la biomasa Sant Cugat?

La biomasa Sant Cugat está formada por materia orgánica, de origen tanto animal como vegetal i aquellos materiales procedentes de su transformación natural o artificial. Según la Directiva 2009/28/CE la biomasa Sant Cugates “la fracción biodegradable de los productos, desechos y residuos de origen biológico procedentes de actividades agrarias (incluidas las sustancias de origen vegetal y de origen animal), de la silvicultura y de las industrias conexas, incluidas la pesca y la acuicultura, así como la fracción biodegradable de los residuos industriales y municipales”. La idea de biomasa es un muy amplia, ya que comprende, des de residuos a partir de actividades forestales, ganaderas y agrícolas, hasta la fracción orgánica de residuos industriales y domésticos, también incluyendo los subproductos de la industria agroalimentaria y de transformación de la madera. Los residuos domésticos son tratados de distinta manera, separadamente en un apartado de residuos, debido a sus peculiares cualidades y por su tratamiento normativo.

¿Cómo se obtiene la biomasa Sant Cugat?

Los huesos de aceituna, la leña, los pellets, las astillas y las cáscaras de frutos son el principal combustible obtenido a partir de la biomasa Sant Cugat. En las viviendas unifamiliares se emplea leña de madera troceada y cortada para utilizarse en aparatos domésticos de combustión, como por ejemplo chimeneas o estufas. Sus medidas suelen ser de entre 15 y 100 centímetros. De la trituración de la biomasa de origen leñosa, ya sea agrícola o forestal, surgen las astillas, que dependiendo del grado de trituración tienen un tamaño u otro. El producto más elaborado son los pellets, que son cilindros pequeños de 6 a 12 milímetros de diámetro y de 10 a 30 milímetros de largo, elaborados con astillas, serrín u otros residuos comprimidos que también se pueden utilizar como combustibles. Un combustible que se emplea cada vez más son las cáscaras de las frutas y los huesos de aceituna, aunque en menor cantidad que la leña, pellets y astillas.

El mercado de la biomasa Sant Cugatse ha ido consolidando en los últimos años, debido al aumento de la explotación del enorme potencial que se dispone, de esta manera aumentando los volúmenes de comercialización y los agentes implicados. Cada vez se pone más esfuerzo en estandarizar y certificar la calidad de esta clase de combustibles, mayoritariamente los pellets y las astillas. De hecho, existen estudios actuales y normativas concretas dirigidas a los residuos como las cáscaras de los frutos y los huesos de aceituna.

Cabe recalcar que, la movilización de la biomasa Sant Cugat, aparte de suponer una obtención de combustible renovable y neutro, por lo que se refiere a emisiones de CO2 y un precio competitivo con otros combustibles como los fósiles, importados del extranjero, también tiene una función imprescindible en el desarrollo socio-económico de las áreas rurales de España y en la mejoría de la gestión de los bosques.

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